RETORCIENDO LA REALIDAD
¡HOLA!
Mi nombre es Sergio León Maroto. Nací en Madrid, y allí me gradué en Historia por la Universidad Complutense. Realicé el itinerario de especialización en Historia Contemporánea, y enfoqué mi Trabajo Fin de Grado al encuadre de los conflictos del imperialismo japonés en China en el siglo XX, con el establecimiento de un encaje de este imperialismo en la teoría dicotómica de los imperios, que Gustavo Bueno concibió para el Imperio español. Se podría decir que mis pasiones son la historia y el continente asiático, entre otras.
Mi vocación por la educación viene de lejos. Desde que comencé la ESO, y gracias a un profesor, ya tenía claro que la historia era mi campo, pero un par de años antes ya sabía que quería enseñar, aunque por aquel entonces hablaba de que si latín, que si geología...
En cuanto a libros de temática educativa, considero imprescindible la lectura de Richard Gerver con "Crear hoy la escuela del mañana" (2010). Es un libro que parece pretender abordar la problemática que mayor debate parece generar dentro del ámbito educativo junto con la ya clásica "exámenes y deberes sí o exámenes y deberes no". Me refiero, por supuesto, al cuestionamiento de la estructura educacional que hoy tenemos y la forma en que la planteamos para nuestros receptores los alumnos. Gerver se va preguntando cosas como si son más importantes los conocimientos per se o las destrezas adquiridas, o para quiénes estamos llevando a cabo la docencia. Esta serie de auto-cuestionamientos son los que nos deben llevar a construir la escuela y enseñanza del futuro. La autocrítica como base principal de la obra.
Precisamente este libro encaja a la perfección con la sintonía que marca la obra-reportaje de "La educación prohibida" (Doin, 2012). Esto se debe a que en el propio reportaje, entre otras cosas, se plantea ya desde el comienzo si la educación y su metodología actual están, en definitiva, bien encaminadas.
No obstante, y estando de acuerdo casi plenamente con el hilo argumental, no me parece menos necesario abordar el hecho de que, en ciertas ocasiones, el reportaje parece olvidarse de que la escuela, como parte de la sociedad, ha de guardar unas ciertas normas y/o métodos, que no por "aburridos", deban ser desechados. Esto viene quizás como una sensación dada por el planteamiento estético de la película, que en ciertas ocasiones parece estar contemplando la escuela casi como una dictadura o un centro penitenciario; nada más lejos de la realidad. Si bien existen claros agujeros a corregir en el ámbito educativo, estos deben ser meditados y debatidos en profundidad, pues un paso en falso pondría en peligro a los futuros sustentadores de la sociedad.
Y a parte de historia contemporánea que más itinerarios hay? En mi carrera no nos especializamos en nada, si quieres hacer algo más te tocaba pagarte especialización y es un pastizal.
ResponderEliminarY otra cosilla, sabes algo sobre detectores de metales?
Buenas Ángel, gracias por comentar! En mi universidad, una vez llegabas a tercero y cuarto de carrera, empezabas a escoger asignaturas de una larga lista de optativas. Esas optativas venían numeradas con un código según el itinerario o itinerarios a los que pertenecían: Historia antigua, Hª medieval, Hª moderna, Hª contemporánea, Antropología de América, Hª de América o Ciencias y Técnicas Historiográficas. Una vez finalizado el grado, el hecho de haber cursado todas las optativas de un mismo itinerario, te reflejaba en el expediente eso mismo (en mi caso la Historia contemporánea). No obstante, esto no era obligatorio, ni tampoco tiene mayor trascendencia. Por supuesto, aquel que quiera especializarse de verdad, debe cursar el máster oportuno.
EliminarEn cuanto a tu pregunta sobre los detectores, la verdad es que me parece un asunto muy interesante, pero del que no tengo mucha idea. Si quieres compartir algo sobre ello o cualquier otro asunto, no dudes en escribir de nuevo. Saludos!! :)